Volar

En el período de casi 15 días la vida me ha acontecido como si hubiesen pasado meses.
Me han comunicado que solo me queda un año de trabajo. Por más de 15 años he trabajo en una ONG que prestaba atención a la comunidad y los "jefes", cristianos y participantes de una iglesia, sin más ni más, se les ha ocurrido cerrarlo porque no se llevan bien en forma personal con la agencia que financia nuestras actividades. Más que importarles un soberano "rábano" la incidencia que creaban a traves de las redes de trabajos de hombres y mujeres con un enfoque de derecho, pues les ha prevalecido sus relaciones personales con "otros".

Mi ex marido de un día para otro ha apurado nuestro divorcio, cosa que estuve presionando por tiempo y tiempo. Pero ahora quiere todo luego... y casi no doy abasto con lo que se viene. Pero por fin viene.

De un día para otro también me avisan que debo dejar mi casa, la que estuvo cedida por años. La están pidiendo. Es legítimo el porqué lo hacen, pero igual resulta dificil despues de tantos años en la que ni siquiera hice un esfuerzo por tener una propia. ¿Qué pasarà? Ya se verá.

Con un año de trabajo no se si podré estudiar aquel magister que había pensado. Las cosas cambian. Y eso me bajonea. Realmente tengo mucha inquietud y necesidad de seguir estudiando.
Veremos si encuentro algo mejor.


Todo esto acompañado a estar compartiendo horas diarias laborales con una compañera de trabajo "traidora" y falaz, de la cual solo me queda soportarla lo que me quede de vida laboral en este lugar.


Volar... es lo que quisiera.
¿Cómo?
Emborrachándome quizás, huyendo a un espacio lejano y oculto de todo. O solo quizas con cerrar los ojos y desaparecer de los ruidos.
Pero necesito urgentemente volar.
Necesariamente volar.
Extremadamente volar.

.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.